El autor español Víctor del Árbol reliza en su última novela, publicada este año, un recorrido por cuatro generaciones de varones de la misma familia, que van heredando culpas y odios.
El protagonista. Diego, es hijo de inmigrantes extremeños y andaluces llegados a la Barcelona de los cincuenta, ha dejado atrás su pasado saliendo de la pobreza más absoluta hasta ser un profesor universitario de vida acomodada y felizmente casado.
Es uno de los hijos de la emigración de la España rural a la España industrial en los años sesenta que intenta liberarse de su pasado, de la sombra de su padre, pero no puede hacerlo, a pesar de que lleva años renunciando a sus orígenes. Sin embargo, su vida está llena de secretos, traumas y contradicciones hasta el punto de que ni él mismo sabe ya quién es.
La historia comienza en un sanatorio donde está ingresado por haber matado a otro hombre. Diego repasa su vida mientras intentamos entender qué le pasó, cuál fue el dotonante y qué hizo este hombre para desatar a un Diego desconocido.
El hijo del padre es un thriller ambicioso que a través de una saga familiar recorre verdades y mentiras, secretos terribles de los que nadie quiere hablar ni afrontar pero que tarde o temprano acaban saliendo a la luz, devastándolo todo.
Y al mismo tiempo es una metáfora de la historia de España del siglo XX. Una reflexión sobre la impunidad, sobre la mentira, sobre cómo el pasado puede destruir el futuro y sobre las relaciones entre padres e hijos.
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