La historia de Un amor ocurre en La Escapa, una pequeña aldea donde Nat, la protagonista, acaba de mudarse, buscando tranquilidad. Pero los conflictos comienzan a surgir en el mismo momento de su llegada: con la casa que alguila, vieja y llena de problemas, y con un casero que se aprovecha de ella.
El resto de los habitantes de la zona: la chica de la tienda, Píter el hippie, la vieja y demente Roberta, Andreas el alemán, la familia de ciudad que pasa allí los fines de semana... la acogen con normalidad, aunque ella busca cierto aislamiento. Poco a poco la distancia que les separa de ellos va complicando la convivencia, pero lo que la novela refleja a la perfección es el ambiente, los silencios y malentendidos, los prejuicios... la falta de comunicación y cómo se forman comunidades que buscan sus culpables.
La historia es aparentemente sencilla, la trama se basa en las relaciones entre los personajes, hay una historia de amor nada convencional, pero la atmósfera densa, crea una tensión constante, por la indefensión de esta mujer que cuenta su historia en tercera persona, en la que los personajes muy bien definidos en muy pocas palabras y en la que el entorno es muy importante.
Reflexiona sobre la idea romántica del amor y los celos, y cómo esto choca con la realidad; las relaciones de poder y humillación entre dos personas, la comunidad y cómo la comunidad admite o rechaza al otro, al extraño, de los comienzos, de cómo cada uno construye o recomienza su propia vida.
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